Llegando, perdida

Llegé al instituto, fuí más rápida que los demas y me dirigí a la clase.
Cuando iba caminando ví a una chica que ya había visto antes, ya se donde, en mis visiones.
Se llamaba Isabella Swan, y se había trasladado a vivir con su padre. Si quería ser discreta tendría que hacer como si no sabiese nada, me acerqué para parecer amable.
-Hola- dije animadamente.
-Soy Alice Cullen

-Encantada Bella, eres nueva ¿NO? es que no te habí visto nunca en Forks - me hice la loca, a los vampiros se nos daba muy bien actuar.

-Pues la verdad es que hace sobre dos años que no viene nadie nuevo, a si que supongo que será una novedad- dije, intentando no hacerle sentir mal.

-Claro, te entiendo, seré lo más discreta posible
-Bella, ¿por qué te has mudado a Forks?

-Emm... no sé, de todas formas, si no quieres contarmelo lo entiendo- era la hora de sacar mi lado persuasivo vampírico

- Oh, lo siento, de veras, no era mi intención hacerte pasar un mal rato

- A bueno, tú lo hiciste por una buena causa, pero no creo que a tu madre le parecieses un estorbo- eso lo sabía de verdad, porque lo había visto en mis visiones

-Si, los Cullen, bueno en verad el doctor Cullen y su esposa nos adoptaron a mi y a mis otros hermanos adoptivos, ya los irás viendo por aquí.

-Buenoo, la verdad es que no me suelo relacionar con mucha gente que no sean mis hermanos, pero los conozco de vista y de haber hablado alguna vez con ellos- la verdad es que mis hermanos y yo no nos relacionabamos con mucha gente.

-Ah, pues entonces poreso nos miran asi

negue con la cabeza divertida

- Si, será por eso, jajaja- yo siempre estaba de un grandísimo buen humor.
-Pero creeme Bella, a tí te aceptarán antes que a mí...

- Creeme, yo y mis hermanos llegamos hace dos años, pero es porque no nos relacionamos- no podía contarle el motivo por el que no nos relacionabamos con los demas.

-Pero cuando los conoces deben de ser majos- señalé a un grupo de amigos riendo animadamente.